domingo, 4 de julio de 2010

Qué es un aborto

Ayer estuve junto al Tribunal Constitucional apoyando a las organizaciones convocantes para pedir a los miembros del Tribunal que apliquen la Ley (¡menuda hazaña!). Ya se que es una ingenuidad, ya se que cada miembro del tribunal además de consultar los artículos de la Constitución que apliquen al caso, oirán, como quien no quiere la cosa, las recomendaciones de su amo (¡Sí, wuana!); incluso se que algunos, en caso de discrepancia, prestarán mas atención a estas últimas; no me extraña, solo me repugna.
A lo que voy: ¿qué es un aborto?. Un aborto es una acción en la que intervienen tres: la madre, el hijo y el cirujano o lo que sea. La madre que toma la decisión, normalmente muy condicionada, el hijo que solo habla desde su silencio y el cirujano o lo que sea que decide cumplir lo que la madre decide. La madre se mueve normalmente por angustia vital, el hijo no se mueve mas que cuando le enchufan la trituradora o la aspiradora y el cirujano o lo que sea se mueve por dinero. No quiero referirme a las madres que se mueven por inconsciencia, por frivolidad. Al otro actor, han conseguido, con harta satisfacción por su parte, dejarlo al margen: el padre.
Lo que la Ley recoja o no recoja respecto de la responsabilidad legal de la madre o la responsabilidad legal del cirujano o lo que sea, no cambia ni un ápice la realidad de lo que es un aborto. La responsabilidad real, incluso la del padre, desde su polvo fáctico, ni se contempla.
¡Enhorabuena mis queridas abortistas!. No se si es un derecho lo que habéis conquistado, sí estoy seguro que el resultado es un desecho.

No hay comentarios: